• “¿Entonces cómo se puede hablar de transición energética cuando se le está diciendo a todo el empresariado del país que el energético que se les dijo que era el energético de la transición, porque era barato, porque reducía emisiones, ya no va a estar?”, cuestionó el presidente del GEB durante un foro sobre los 30 años de la CREG.
  
  
• En este mismo espacio que se llevó a cabo en la Universidad Externado en Bogotá, Ortega reiteró el llamado urgente para que la CREG opere con sus seis comisionados para tener unas reglas claras en materia de regulación.

   

Bogotá D.C, 11 de septiembre de 2024. La necesidad de que Colombia deba importar gas para su demanda interna, sin tener siquiera las reglas claras para proceder a dicha importación, es una de las principales preocupaciones del sector energético, la cual fue expresada por Juan Ricardo Ortega, presidente del Grupo Energía Bogotá.

“Ya es absolutamente claro y evidente que el país no tiene suficiencia de gas y que se va a volver importador de gas. Yo creo que esa es una reflexión profunda, ¿cómo un país que claramente podía ser gasífero, se va a volver importador de gas, teniendo ejemplos tan claros como el Perú que están haciendo del gas su transición energética?”, expresó Ortega durante el foro “30 años de la Creg”, evento que se cumplió en las instalaciones de la Universidad Externado en Bogotá.
Añadió que “hoy en día nadie puede predecir datos con información del pasado existente, el futuro ya no es una réplica del pasado, el futuro es imposible de predecir, y eso es trascendental porque toca tener una matriz mucho más diversificada que no la estamos logrando, porque no hay un solo proyecto hoy en construcción y además necesitamos gas. Y tomamos la decisión por acción u omisión de que nos volvimos dependientes de una importación, que al día de hoy nadie sabe cómo se va a importar y estamos a un año y medio de tener que importar el 50 por ciento de la demanda del interior del gas del país”, expuso el Presidente del GEB.
Ortega explicó que lo que se ha generado es incertidumbre entre el sector, porque el gas, que era el energético anunciado dentro de la transición energética ahora debe ser importado.
“¿Entonces cómo se puede hablar de transición energética cuando se le está diciendo a todo el empresariado del país que el energético que se les dijo que era el energético de la transición, porque era barato, porque reducía emisiones, ya no va a estar? Hoy en día los que están felices de la vida son los carboneros. Colombia va a hacer el regreso al carbón más rápido que cualquier país del continente”, aseguró en este foro.
La CREG
Ortega reiteró el llamado de la necesidad de contar con una Comisión de Regulación de Energía y Gas que cuente con todos sus comisionados, precisamente en este foro que tuvo como propósito destacar los logros de la CREG, durante sus 30 años de existencia y los desafíos que tiene en la actual coyuntura del sector.
“El país necesita por lo menos da una discusión de eficiencia energética, sino vamos a poder controlar los precios, nos ayuden a controlar la cantidad. ¿Y cómo se controla la cantidad? Enseñando y dando señales regulatorias que requieren lo seis miembros de la CREG, porque llevamos ya casi tres años sin tener una CREG que opere”, puntualizó Juan Ricardo Ortega.
Tarifas y proyectos
En este mismo foro, el presidente del GEB también dijo que, dentro del mismo sector, hay un profundo desconocimiento de su operación y de la forma en que se hacen grandes inversiones, y tratan de responsabilizar a las generadoras de las altas tarifas.
“Tuvimos el agosto más seco en 55 años y es muy triste oír a los abogados electricistas diciendo que el problema de este país es una generación que aún se le pone precio. Eso muestra una profunda ignorancia de cómo funciona el sector eléctrico colombiano. ¿Y por que es profunda? Porque esas empresas que tienen hidroeléctricas, yo estoy en la junta directiva de una de ellas, buscan vender la electricidad con contratos de largo plazo. Eso se hace con deuda que hay que pagar todos los meses, nadie hace eso con capital, son proyectos de 2 mil, tres mil millones y la deuda no es climática, la deuda es un contrato que cada mes hay que pagar”, explicó.
Recordó que tan solo este año se ha tenido que comprar energía en dos ocasiones. “Porque no somos capaces de honrar los contratos, porque no hay agua, y si no hay agua, el que no tiene agua se friega, puede que sea dueño de la hidroeléctrica, pero una hidroeléctrica sin agua no sirve para nada”.

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